Este hecho narra una historia de
Gabriela, una joven de 16 años de edad quien orientaba su vida en base a la
astrología.

Camino a casa de Anahí un auto choca
la camioneta en la que viajaban. A pesar de no recibir heridas de gravedad,
fueron a una clínica y vieron que todo estaba en orden y volvieron a casa
Gabriela durante el día siguiente recibió atenciones, visitas y llamados de
muchas personas, entre ellos Felipe.
Posteriormente regresaron a la clínica
para realizarse un chequeo y ella expreso que tenía un “chichón” en un glúteo,
el doctor la revisa y le hacen numerosos estudios y le informan que sin falta
debía regresar al día siguiente para tomarle una muestra.
Al otro día llego tío Gerardo (el médico
de la familia) a casa de Gabriela y les dijo que los estudios salieron mal y se
fueron urgente a la clínica. Al llegar le informan que debían operarla porque tenía
un tumor, la cirugía seria a la mañana siguiente. Al pasar la noche cuando
Gabriela estaba por entrar al quirófano vio que en el pasillo se encontraba
esperándola mucha gente para darle ánimo,
entre ellos Felipe, quien le dijo que la quería. Finalmente salió todo bien
pero debe continuar un largo tratamiento de quimio terapia.
Un día Felipe fue a buscarla del lugar
donde ella se trataba y le confeso que él también estaba enamorado de ella
desde hace mucho tiempo y comenzaron una relación. Pero ella era consciente de
lo dura de su enfermedad y su penoso tratamiento y no quería que Felipe
sufriera por su causa y tras la muerte de Esperanza una compañera y amiga de
tratamiento, decide alejarse de él.
Pasando un tiempo todo comenzó a mejorar,
ella termino su tratamiento y pese a que debía realizarse controles para
corroborar que el cáncer había desaparecido por completo.
Una tarde su hermana Violeta y Anahí
la llevan engañada a una heladería donde Felipe la esperaba quien la convenció de
volver con él.