El Caballero De La Armadura Oxidada.

 Cuenta la historia de un cabalero que era bueno generoso y amoroso, dedicaba su vida a luchar, matar dragones y rescatar damiselas. Este caballero tenía una armadura, que reflejaba unos rayos de luz tan brillantes que el sol parecía salir del mismo. El caballero vivía en un castillo con su esposa Julieta y su hijo Cristóbal, pasaban los días y el caballero no se quitaba su armadura. Hubo días que no se la quitaba ni para dormir.

 Julieta le reclamo, le pidió que se quitara la armadura y él le respondió que no. Ella lo amenazó con marcharse y llevarse a Cristóbal.

  El caballero intento quitarse la armadura, pero fue allí cuando no pudo, y se dio cuenta que estaba atrapado, al no poder quitarse la armadura entonces tuvo que marcharse en busca de ayuda para poder quitarse la armadura. En el camino encuentra al herrero, el intenta ayudarlo pero no lo logra. También encontró a Bolsa alegre, él le dice que valla al bosque y busque al mago Merlín.

    Merlín le propone una solución, pero no va a ser fácil. Tiene que recorrer el camino de la verdad y superar los tres castillos, fue acompañado por rebeca y ardilla.

En el castillo del SILENCIO se da cuenta que estar solo y en silencio le da miedo, aprendió a escuchar que es un gran paso para encontrar la verdad y el amor.

En el castillo del CONOCIMIENTO, está en una oscuridad. Allí encuentra carteles, cada uno de ellos los lleva a pensar, lo que hace que conozca algo más de él. Esto lo hace llorar y parte de su armadura se oxida y se parte por sus lágrimas.

El caballero se durmió y se encontró acostado bajo un árbol, él estaba desnudo sin su armadura. Solo le quedaban pedazos de metal en sus brazos.

En el casillo de la VERDAD Y LA OSADIA, se encuentra con un dragón de la duda y el miedo que no lo deja pasar. Para poder pasar debía tener voluntad ya que el dragón era solo una ilusión creada por su miedo y su duda. El caballero enfrento al dragón, demostró que tenía voluntad y el castillo desapareció, al llegar a la cima de la verdad, ya no queda nada en él, la armadura ya se ha caído por completo después de tantas lágrimas derramadas. Este viaje fue muy provechoso para él  y comprendió que todo estaba hecho de amor. Y que si no se amaba así mismo no podía amar a nadie más.